Siempre me dan nostalgia estos temas de nuestro Simón Díaz.
Seremos capaces también de arruinar estos recuerdos?
De seguir el mismo rumbo ni éstos se salvarán.
Cambiando el nombre de las calles,
de las montañas,
de los cursos universitarios,
del país,
de las instituciones,
de las leyes,
de la historia,
la constitución,
del dinero,
nada sobrará.
Eleazar Mora: Caballo Viejo y Mercedes.
@LupitaVenegasDC: La incompatibilidad de la «nueva era» con el Cristianismo.
Cuando buscas la «energía dentro de ti», encontrarás las energía del enemigo.
Juan 14,6:
Le dice Jesús: Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre sino por mí.
En el versículo anterior, 14,5 quien le preguntaba a Jesús era Tomás, sobre «cómo podemos saber el camino?»
Todos los otros caminos, diferentes al de Jesús, van para uno muy ancho, que cada quién se construye a su manera (Feng-shui, Reiki, Eneagramas (la cuarta vía), Yoga, etc), y terminam abruptamente, sin Dios.
El Catecismo dice:
2116: Todas las formas de adivinación deben rechazarse: recurso a Satán o a los demonios, evocación de los muertos, y otras prácticas que equivocadamente se supone «desvelan» el porvenir (cf Dt 18,10; Jr 29,8). La consulta de horóscopos, la astrología, la quiromancia, la interpretación de presagios y de suertes, los fenómenos de visión, el recurso a «mediums» encierran una voluntad de poder sobre el tiempo, la historia y, finalmente, los hombres, a la vez que un deseo de conciliarse los poderes ocultos. Están en contradicción con el honor y el respeto, mezclados de temor amoroso, que debemos solamente a Dios.
2117: Todas las prácticas de magia o de hechicería mediante las que se pretende domesticar las potencias ocultas para ponerlas a su servicio y obtener un poder sobrenatural sobre el prójimo -aunque sea para procurar la salud-, son gravemente contrarias a la virtud de la religión. Estas prácticas son más condenables aún cuando van acompañadas de una intención de dañar a otro o recurren a la intervención de los demonios. El llevar amuletos es también reprensible. El espiritismo implica con frecuencia prácticas adivinatorias o mágicas. Por eso la Iglesia advierte a los fieles que se guarden de él. El recurso a las medicinas llamadas tradicionales no legitima ni la invocación de las potencias malignas, ni la explotación de la credulidad del prójimo.
Hay quien diga que las vacas dan más leche cuando la llaman por su nombre
El Buen Pastor nos llamará por nuestro nombre, y siendo del rebaño no nos confundirá.